2005

2005-10-20

Informe E2005: Redes y trabajo asociativo de hombres ante la violencia de género en España: situación y perspectivas.

Ponencia de Jose María Espada Calpe, presentada en el Congreso sobre violencia contra las mujeres, celebrado en Vitoria-Gasteiz los días 19, 20 y 21 de octubre de 2005.



Disponible también en blog Masculinidades

2009-03-30

Manifiesto y fotografías de la actividad realizada por Hombres Igualitarios de Jerez en la Calle Larga de Jerez de la Frontera.

En un lugar de la plancha… de cuyo nombre no quiero acordarme, hace tiempo que vivía un grupo de personas que nacieron con churrilla, a las cuales llamaron hombres. Se suponía que por “ser hombres” se tenían que encargar de ganar grandes batallas, ser famosos, ganar mucho dinero, ser los “cabezas de familia”, no llorar jamás, no hacer ni el huevo de las tareas domésticas y no tener ninguna de las cualidades que se suponíano era de hombres. ¿De quien eran? Pues “de mujeres”, “de mariquitas”, “de calzonazos”. Quienes no seguían este modelo, para los machistas de ese lugar de la plancha, eran simplemente “Quijotes carajotes”. Estos quijotes, en el principio de su cambio hacia la igualdad, insistían en que no veían el polvo de las esquinas, que no veían las pelusas adueñándose de sus escritorios, y que las manchas enormes de sus ropas en realidad eran “para ir a la moda”. Insistían en que generalmente una mujer, sus “mamás”, o si les gustaba enrollarse con chicas, “sus novias y/o esposas”, eran quienes tenían que hacer esas tareas, porque ellos, los muy pobrecitos… ¡no sabían!

Un día… se acercaron a ese instrumento misterioso y desconocido para ellos que era la plancha… nunca la habían utilizado poniendo la excusa de que la “arruga era bella”. Le dieron al majo botoncito mágico, y descubrieron que el escaqueo de planchar era una táctica voluntaria de aprovechamiento del trabajo de las personas que le planchaban, y que a ellos les gustaba llevar las camisas limpias, con buen olor y más o menos planchaditas. Empezaron a planchar, y practicando, practicando, descubrieron con alegría que progresaban en el arte de planchar, conocieron esos “truquillos” para planchar mejor y más rápido que solamente quienes planchan conocen. Cuando estos quijotes comentaron que planchaban, los machos machitos machotes machistas se burlaron de ellos, llamándoles “quijotes carajotes”. Les dio igual, dijeron que se consideraban “HOMBRES IGUALITARIOS”, que no querían tener nada que ver con esos machos machitos machotes machistas, que pasaban de reírles las gracias y seguir haciendo el servicio machista obligatorio, que estaban dispuestos a acercarse a otros hombres para comentarles que para los hombres es beneficioso ser capaz de hacer las tareas domésticas, porque no dependerán de nadie para que les cubra lo doméstico. Es por ello, que un día… se juntaron y decidieron salir a la calle, salir a la plaza, pero no para ganar ninguna batalla, sino para con alegría mostrar a otros hombres que… LAS TAREAS DOMÉSTICAS TAMBIÉN SON COSAS DE HOMBRES. Y SI OTRO MUNDO ES POSIBLE, Y ESTÁ EN NUESTRAS MENTES, NECESITA DE NUESTRAS MANOS PARA HACERLO (Y PARA PLANCHARLO).

HOMBRE, NO TE ARRUGES. LA PLANCHA NO ENTIENDE DE SEXOS.

PLANCHAMOS POR LA IGUALDAD. ATRÉVETE A MOSTRAR TU HABILIDAD PLANCHARINA, HOMBRE. FUERA EXCUSAS, DÉJATE DE ESCAQUEOS. CAMINA HACIA LA IGUALDAD, QUIJOTE, CON TU SANCHO PLANCHA

Planchado por la igualdad
Foto del planchado por la igualdad realizado el 30 de marzo de 2005 en Jerez de la Frontera.